Hoy le vamos a dar caña a uno de nuestros clásicos más top: ¡los nuggets de pollo! ¿Quién no se ha zampado unos de estos bocaditos crujientes y llenos de sabor? En este rollo que te traemos, vamos a desmenuzar sus raíces, cómo los elaboramos y algunos datos curiosos que te dejarán flipando.
Así que, tómatelo con calma, pide una pinta bien fresca y déjate llevar en este viaje gastronómico.
Orígenes de los nuggets
Los inicios de los nuggets de pollo son un verdadero misterio, como la fórmula de la Coca-Cola. Algunos dicen que allá por los años 50, un tal Robert C. Baker, que era profe de ciencias de las aves en la Universidad de Cornell en Nueva York, tuvo una iluminación.
El profesor buscaba cómo darle caña a esos pedazos humildes de pollo, ¿y qué hizo? Se sacó de la manga la técnica de cortarlos en cachitos y rebozarlos. ¡Y menuda genialidad! La idea pegó fuerte y para los años 80, los nuggets eran la bomba en los locales de comida rápida.
Aunque los nuggets de pollo se hicieron populares en todo el mundo gracias a la cadena de comida rápida McDonald’s, se dice que el primer establecimiento que los vendió fue la cadena de comida rápida mexicana Taco Bell.
Elaboración
Preparar unos nuggets de pollo al estilo tradicional es muy fácil, pero requiere su toque de magia.
Primero, se corta el pollo en pedazos, tamaño mordida, para que nadie se atragante.
Luego, viene el rebozado: harina, especias secretas, y huevo batido.
Calentamos bien el aceite, y freímos los nuggets hasta que estén dorados y crujientes. Los escuchamos chisporrotear, que eso es música para nuestros oídos.
Y listo, tenemos unos nuggets caseros dignos de campeones, perfectos para devorar con amigos y una buena cerveza.
Nuggets de pollo de récord
¿Sabías que existe un récord del nugget de pollo más grande del mundo?
En Finlandia, un equipo de cocineros liderado por Juha-Pekka Perämäki logró crear el nugget de pollo más grande del mundo, pesando más de 78 kilogramos. Fue un desafío culinario monumental que capturó la atención de la comunidad y se convirtió en un récord Guinness.
El nugget fue cocinado con destreza y posteriormente vendido en porciones para recaudar fondos benéficos.
El récord mundial sigue en pie y ha inspirado a muchos otros restaurantes y chefs a crear sus propias versiones de nuggets de pollo gigantes. ¿Te animarías a probar uno tan grande?
